domingo, 26 de diciembre de 2010

MITOS , LEYENDAS Y HECHOS MISTERIOSOS DE LA LOCALIDAD DE LO GALLARDO

                                                INTRODUCCION
  Cada pueblo, zona o lugar, es actor de vivencias que de alguna forma le dan esencia a su vida cultural en particular lo que perdura a travès del tiempo y lo identifican con rasgos propio y distintivos.
  Los testimonios que se presentan en esta recopilaciòn de mitos, leyendas y episodios misteriosos de la zona rural sur pasado el puente Lo Gallardo de San Antonio Quinta Regiòn de Chile, son y han sido obtenidos de conversaciones con los propios lugareños que son los actores de cada evento aquí presentado.
  La "Agrupación Comunicacional CCYM" de Lo Gallardo, que edita este ejemplar pretende a través de varios documentos símiles a este, recopilar y posteriormente editar sucesos acontecidos en toda la comuna y provincia en un futuro inmediato, con la finalidad de explicarse o a lomenos conocer hechos sin explicación lógica y natural.
  Esperamos contar con su beneplácito y favorable acogida lo que nos incentivará seguir avanzando con el trabajo comunicacional propuesto en beneficio de la cultura pueblerina y vecinal

                                                                                               El Editor.
Agradecemos al profesor José Berrios que encabeza esta importante agrupación.

NOMBRE DEL PUEBLO DE LO GALLARDO
  Lo Gallardo es bautizado con ese nombre, pues en la antigua obra de ladrillos de don Alvaro Márques, el popular vecino conocido y ya fallecido "Capitán Veneno", vivió un indio de apellido Gallardo.
  La enigmática Quintrala en su paso por el sendero que llevaba a otros destinos, era asidua visitante del indio Gallardo y pernoctaba por varios días en este lugar junto a su querido y amado indio, para luego continuar sus maldades del sur del departamento de San Antonio, específicamente hacia el Covento y localidades aledañas.

CRUCES DE ORO MISTERIOSAS
  Existe hoy en día, frente a la actual iglesia un par de cruces de mediano tamaño que nadie puede explicar el motivo de su presencia, cabe mencionar que la antigua iglesia católica estaba ubicada unos 500 metros de estas cruces, en el paradero 25.
  Los antiguos vecinos hablan de una gran cruz de oro que aseguran que por allí alguien la ha visto, pero que ni el mismísimo demonio pudo sacarla,aunque hacia de las suyas, subiendo y bajando hacia la quebrada de los coligües, en la cual se mantiene en sus entrañas.

CASA EMBRUJADA
  Allá por la década de los años 60, en la localidad bruja de Lo Gallardo, sucedían hechos muy extraños y curiosos de los que mucha gente de esa época que aún existen guardan recuerdos en el subconsciente colectivo, pero lo que si es seguro es que no tuvieron ni tienen explicación lógica ni racional alguna.
  Cada anochecer de invierno de esa época, en una propiedad ubicada entre el paradero 20 y 21, a los pies del cerro pleno corazón de la aldea vivía la familia Guzmán quienes durante año ocuparon el predio. El núcleo familiar estaba compuesto por alrededor de 12 personas y en la parte posterior del sitio se encontraban insertos un par de perales gigantescos, en todo caso las vivierndas ocupadas en ese entorno, tenían vista y salida hacia la en ese entonces llamada Calle Larga.
  Lo único cierto, es que  se  hizo habitual que en cada anochecer los pobladores en casi su totalidad, llegaban al sitio, punto en que misteriosamente caían sobre el techo de una vivienda decenas de piedras de regular tamaño en forma constante a vista y paciencia de los observadores, entre los que se encontraban periodistas nacionales y extranjeros, como así también policías, bomberos y detectives.
  Las pedradas llegaban solo al techo de la vividenda que era ocupada para la venta y excpendio de vino y licores y la gente común tuvo la posibilidad de tomarla en sus manos, pues la cantidad de proyectiles era abundante y no cesaban de caer y caer, aunque por el radio de más o menos 50 metros la vigilancia era estricta y apoyada por faroles, linternas, focos y todo tipo de aparatos para tratar de encontrar al o los culpables del inusual evento.
  Solo se logró ver de manera poco clara, la presencia y posterior huida de un par de diminutos bultos opacos-se dice que eran duendes- que corrieron y se internaron en una zarzamora cercana, unos 100 metros de la extraña morada de los incidentes, pero no se logró disipar ninguna duda.
  En otra modesta vivienda de la misma propiedad y familia, sus moradores indicaban que a altas horas de la madrugada, introducían sendas cuchillas por la abertura de las frágiles paredes de madera, sin embargo, solo miedo y misterio, ninguna explicación de personas o institución sobre hechos que a esas alturas adquirió cobertura nacional.
  Pasaron los días y mese hasta que la caída de proyectiles laja dejaron de caer y poco a poco los afectados volvieron a vivir en aparente calma y tranquilidad, para posteriormente después de algunos años emigrar de esa misteriosa propiedad bruja.